Caracas, 29 de julio de 2019.- La mañana de este lunes desde la Sala "Horacio Peterson" de la Universidad de las Artes (Unearte) la comunidad educativa en pleno de la Escuela Nacional de Educación Inicial (Endei) “Negra Matea”, de la Fundación Nacional El Niño Simón (Fnns) celebró el acto de promoción de los niños y niñas del 3er grupo de prescolar al primer grado de educación básica.

Entre las autoridades asistentes al acto estuvieron, la directora del Despacho de la Fnns, Dra. Karla Parra, El Gerente de Planteles Educativo, Delvis Ravelo, y la directora del Endei “Negra Matea”, quienes dirigieron unas palabras a todos los presentes antes de cederles la oportunidad a las maestras, algunas representantes e inclusive a los pequeños y enternecedores graduandos.

Algunos de estos discursos fueron especialmente conmovedores como: cuando los niños y niñas del tercer grupo recitaron un poema visiblemente emocionados, sensibilizando a todo el público presente, pero, hay que destacar el discurso de la representante de uno de los niños promovidos este día, la señora Osly Hernández que causó reflexiones interesantes y emociones que no se pueden describir, por lo que se transcribirá a continuación:

"La vida es una secuencia de retos que, al superarlos, nos sentimos satisfechos, felices. Hay muchas formas de transitar este camino y hoy me gustaría reflexionar con Uds. al respecto, pues desde este momento empieza la labor más compleja de una sociedad: la formación de la generación que llevará las riendas del futuro.

Y Uds. me dirán que nuestros niños aún están muy chiquitos. Y yo les diré desde que nuestros peques nos preguntaron sus millones de ¿Por qués?, y cuando empezaron a responderlos... Cuando dijeron: me gusta, no me gusta. Cuando eme con a se convirtió en MA y de ahí salió MAMÁ y luego AMO A MI MAMÁ. Y así, empezaron a leer y entender que lo que sienten puede ser comunicado, nos dieron señales de entender su realidad, de que ya están tomando decisiones todos los días, que ya son “alguien en la vida”.

Pero junto a esto, en nuestra Escuela Negra Matea, le dijeron a nuestros niños que hubo un héroe en Venezuela de carne y hueso, que Liberó 5 Naciones y terminó siendo quien derrotó al monstruo que atacó nuestro sistema eléctrico, Sí, Simón Bolívar, en un cuento hecho por mi hijo “Tupac”. También les enseñaron que el 12 de Octubre empezó una lucha, la resistencia de nuestro pueblo contra un agresor muy cruel, que no venía de la “madre Patria”, si no que buscaba apropiarse de nuestra tierra, recursos y esclavizarnos.

También les mostraron nuestra diversidad cultural: fueron diablos de yare, san juaneros, bailaron los chimi chimitos, la burriquita... Celebraron el día de madre y padre, del abrazo en familia, y les enseñaron a dar gracias todos los días por sus alimentos y a desear que lleguen siempre a quien no los puede tener. Vieron crecer plantas y nos volvieron locas y locos sembrando semillitas por toda la casa, maravillados de la magia de la vida. También a cuidarlas, a no botar basura y a entender que son corresponsables de un planeta que necesita de su amor para poder seguir viviendo en él.

Todo esto, padres y madres, son una batería de valores que el sistema de educación de nuestra revolución bolivariana ha sembrado en nuestros hijos: solidaridad, amor, identidad, soberanía. A esto es lo que temían quienes desean hacer de ellos sus nuevos esclavos. Nuestros hijos e hijas son en este instante, el hombre y la mujer que este mundo necesita.

Pero hoy salimos de este nido acurrucadito e inicia otra etapa, en nuevas escuelas, con nuevas maestras y amigos, con nuevos valores. Afuera, sabemos que impera la ley del más fuerte, impuesta por el ataque a nuestra economía por otro monstruo que promueve el egoísmo, la acumulación, la indiferencia, la competencia insana, el machismo, la violencia, el odio. Una serie de valores autodestructivos, que van en contra de la naturaleza humana: colectiva. Nos gusta vivir en manada, con nuestros hijos, padres, abuelos, amistades ¡Cerquita! Y si nacimos en nuestra América, ese vínculo es más estrecho, más caluroso, hasta musical.

Pero nos insisten en decir que lo natural es la competencia del más fuerte, la individualidad, el desinterés por el problema ajeno, el encierro o el emigrar para que “nada nos pase”. La realidad es que no podemos huir de los problemas. ¡Debemos enfrentarlos! ¡Juntos, en manada!

Por eso, lo más importante del momento que inicia, es nuestra capacidad como padres, tutores de estos héroes y heroínas, para que continúen su formación para la humanidad. Tenemos que darle a nuestro País y al futuro la mejor generación posible, y esa importante labor está en nuestras manos. Veamos a nuestros niños y niñas como el proyecto más importante, como la oportunidad de corregir todo aquello que no nos gustó de la vida propia. Con amor, atención, dispuestos a aprender lo que necesitemos, ¡Podemos lograrlo!

Más allá del mérito por el logro alcanzado, es para la humanidad muy importante que nos detengamos siempre a mirar el proceso, el camino, la forma como llegamos a la meta. Como madre, me siento satisfecha de lo que han hecho con mi hijo. Como parte de la Comunidad Educativa, me siento feliz de haber compartido con ustedes esta etapa. Como ciudadana, me siento orgullosa del modelo educativo que nos dimos, al elegir el socialismo como opción para nuestro país.

Gracias a mi mamá y a todas las abuelas y abuelos por acompañarnos en esta compleja tarea.

Gracias maestras, autoridades, trabajadoras y trabajadores por defender la educación bolivariana”. (Palabras de la representante, Osly Hernández desde la sala Horacio Peterson de la Unearte 29/07/2019)

La Fnns aunque triste por este “hasta luego” también está satisfecha de la labor cumplida con este importante grupo de niñas y niños sanos, inteligentes, capaces y lindos en cuerpo y alma y, les recuerda a los padres, madres y representantes que aún pueden contar con los servicios que brinda esta institución a través de las Casas de los Niños, del Servicio de Atención Integral de salud, social y defensorías en su sede principal y si lo desean con formación musical a través de la Escuela de Formación Musical “El Niño Simón”. Nuevamente, Chicos esta es su casa, siempre de puertas abiertas para Uds. ¡Felicitaciones!