Caracas, 16 de noviembre de 2017.- La Unidad Educativa Especial Bolivariana “Manuelita Sáenz” fue creada el 19 de noviembre de 2007 por la Fundación Regional “El Niño Simón” Miranda, presidida en aquel momento por la Ing. Marleny Contreras de Cabello, junto con el entonces gobernador, Ing. Diosdado Cabello Rondón.
El proyecto de la escuela para niñas y niños con diversidad funcional motora surge cuando el gobernador del estado Bolivariano de Miranda, Ing. Diosdado Cabello, y la primera dama regional asisten a un evento en las instalaciones del Servicio Diagnóstico Integral del municipio Sucre y conocen a Roger Contreras, un niño de 11 años de edad diagnosticado con mielomeningocele e hidrocefalia. Él les manifestó su preocupación, explicándoles que cerca de su casa no contaba con una institución educativa para diversidad funcional motora; por tal motivo se vería en la necesidad de retirarse de la escuela, la cual se encontraba distante de su residencia y por su condición física se le dificultaba asistir.
El gobernador Diosdado Cabello y la ingeniera Marleny Contreras, al conocer la situación de Roger, deciden iniciar el proyecto de una institución educativa, con las condiciones de dotación e infraestructura pertinentes acordes a niñas, niños y adolescentes con diversidad funcional motora y bajos recursos económicos, justificados e inspirados en la constancia y fortaleza de nuestra heroína “Manuelita Sáenz”.
La Unidad Educativa Especial Bolivariana (U.E.E.B.) “Manuelita Sáenz” dependía entonces de la Fundación Regional “El Niño Simón” Miranda, hasta el mes de mayo del año 2016 cuando pasa a ser adscrita a la Fundación Nacional “El Niño Simón” (Fnns). Con la puesta en marcha de esta institución, las niñas, niños y adolescentes con discapacidad intelectual y física tienen garantizado su derecho a la educación.
Este centro está ubicado en la popular parroquia Petare del municipio Sucre, donde le garantiza a los niños de la zona una educación digna, logrando acabar con el calvario de trasladarse hacia los distantes centros de educación especial, y les evita resignarse a la desatención por razones económicas o sociales, asegurándoles, de este modo, una mejor calidad de vida y educación.
Al respecto, la U.E.E.B. “Manuelita Sáenz” atiende a niños con discapacidad motora, específicamente parálisis cerebral y síndromes asociados como la espina bífida. Asimismo, maneja lo asistencial y lo pedagógico, contando con 6 niveles de atención que se conforman coetáneamente, integrados por 6 niños en cada grupo, quienes son atendidos por una docente y una auxiliar por aula.
La directora, personal administrativo, maestras, auxiliares, cocineras y aseadoras cuentan con la calidad humana y solvencia moral suficiente para, coordinadamente con las familias y la comunidad, dar soluciones a las necesidades de estos niños, aportando desde el amor un granito de arena para que su vida sea cada día mejor.
En este sentido, las docentes de la U.E.E.B. “Manuelita Sáenz” tienen una vinculación especial con la familia para reforzar en la casa lo que se hace en el aula. Adicionalmente, estas niñas, niños y jóvenes gozan de todos los beneficios que la Fundación Nacional “El Niño Simón” brinda en sus centros, tales como: asistencia nutricional, dotación de uniformes, atención pedagógica, jornadas odontológicas, entre otros.
Pero estos beneficios van más allá, ya que en el ámbito asistencial se les facilitan ayudas técnicas como la dotación de pañales, sillas de ruedas y andaderas, normalmente a través de la Misión José Gregorio Hernández y de la comunidad organizada por medio de los Consejos Comunales. Además de ayudas económicas para la realización de las cirugías que requieran estos niños a través de la Gerencia de Atención Integral de la Fundación Nacional “El Niño Simón”.
De esta manera, brinda atención a 42 niñas, niños y adolescentes con discapacidades, provenientes en su mayoría de las zonas populares del municipio Sucre, ofreciéndoles el ambiente y las condiciones adecuadas para que realicen todas sus actividades, garantizando un desarrollo físico y mental acorde a sus capacidades, dando continuidad a los programas de inclusión en materia educativa impulsados por el Gobierno Bolivariano.
Cabe destacar que las adaptaciones de las áreas se hacen tomando en cuenta todo lo referente a la educación especial y las potencialidades que las niñas, niños y jóvenes pueden desarrollar dentro de sus limitaciones. Además, este año la unidad educativa especial tiene el proyecto piloto sobre el taller de formación laboral para atender a 6 niños más.
Finalmente, en la U.E.E.B. “Manuelita Sáenz” las “Manitas de Colores” representan una forma de solicitar ayuda, así como la marca de cada niño que ha pasado por sus aulas y la vida de sus trabajadores, también la disposición de dar todo cuanto sea posible para alcanzar el buen vivir de niñas, niños, jóvenes con discapacidad motora e intelectual. Por ellos, todas las manos de este centro de educación están siempre abiertas en la parroquia Petare, sector La California, av. Paris con avenida La Haya.
Reivindicando el derecho a la educación para las personas con discapacidad
Tradicionalmente los venezolanos con algún tipo de discapacidad contaban con escasos servicios educativos gratuitos; el poder darles educación de calidad para una vida digna de acuerdo a sus necesidades y capacidades era un reto que no sólo se debía afrontar sino vencer.
La educación especial como modalidad del sistema educativo venezolano se inició en la década de los 70 con un modelo propio de la época, donde las personas con discapacidad o con necesidades especiales seguían siendo imperceptibles. No es sino hasta el año 1999, que la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela consagra los derechos de las personas con discapacidad en su artículo 81.
En Venezuela, a partir de la llegada del Comandante Hugo Chávez a la presidencia, el Gobierno Bolivariano se ha caracterizado por crear políticas humanistas que garantizan la justicia social, entre ellas las referidas a la inclusión, participación, educación, salud y todos los derechos de las personas con discapacidad, buscando saldar la deuda que hasta entonces el Estado venezolano tenía con estas personas que vivían en las sombras.
Además, cuentan, a partir de 2007, con la Ley para las Personas con Discapacidad y, más recientemente, la Asamblea Nacional Constituyente instauró un capítulo para la discapacidad, que amplía la protección y asegura igual reconocimiento ante la ley. De esta manera, el Estado hace de la educación un servicio público sin discriminaciones de ningún tipo.
Asimismo, el artículo 102 de nuestra Carta Magna indica que el Estado venezolano debe asumir la educación como deber social para poder construir, con la participación de las familias, una sociedad justa. Es por ello, que desde el 2007, el Gobierno Revolucionario, de la mano del entonces gobernador del estado Miranda Diosdado Cabello y la primera dama Marleny Contreras, crea la U.E.E.B. “Manuelita Sáenz”, donde el concepto de educación especial da un giro revolucionario, haciéndose bolivariana y profundamente humana.
